UHintifada 317: Barbara Demurtas: «Trasladar la embajada de EEUU a Jerusalem no tiene ninguna validez legal, pero Israel se ve así autorizada en su hoja de ruta de limpieza étnica y anexión de la ciudad» Imprimir
UHintifada
30/05/2018

ivankaEl pasado 15 de mayo se cumplían 70 años del día de la Nakba, la fatídica fecha en la que el movimiento sionista declaró unilateralmente el estado de Israel y dio comienzo a la limpieza étnica del pueblo palestino. La administración de EEUU ha querido hacer coincidir con esa efeméride la inauguración de su embajada en Jerusalem. El traslado de la delegación diplomática de Tel Aviv a Jerusalem, pese a ser una violación flagrante de la ley internacional, supone un importante espaldarazo a las pretensiones del régimen sionista de anexionarse la Ciudad Santa. Este acontecimiento ha deteriorado la ya de por si grave situación en la ciudad. En la edición de esta semana hemos analizado la crítica situación en Jerusalem con la activista e investigadora Barbara Demurtas. Demurtas lleva desde 2005 trabajando en solidaridad con Palestina de la mano de distintas ONGs y en la actualidad coordina los proyectos de la organización Mundu Bat en Palestina. Vive, además, en Jerusalem Este. Su especialidad es el trabajo de investigación en torno a las violaciones de los Derechos Humanos. En su intervención nos ha dado cuenta de las protestas convocadas con motivo de la inauguración de la embajada estadounidense y el día de la Nakba, y ha subrayado que este episodio no es sino un paso más en una situación diaria ya de por si crítica. En su opinión Israel trabaja ininterrumpidamente para eliminar a la población palestina. Para ello utilizan infinidad de estratagemas: administrativas, violencia directa, demoliciones de viviendas, detenciones arbitrarias de activistas, infraestructuras... con un objetivo claro, la limpieza étnica de la población palestina de Jerusalem. Esta última medida de la administración de Donald Trump, aunque desde el punto de vista del derecho internacional no tiene ninguna validez legal, autoriza a Israel ante la opinión pública internacional en su hoja de ruta hacia la limpieza étnica y anexión de Jerusalem.