No hay que dar lo que sobra, sino compartirlo Imprimir
Brigada Cuba
10/07/2009
El viernes por la mañana continuamos con la labor de la escuela, aunque notando el cansancio de toda la semana y las Bucaneros (una cerveza cubana que nos gusta mucho) del día anterior. Después del disfrute del típico moros y cristianos (arroz con alubias) preparados por nuestras grandes cocineras Isabel, Francis y Anita, amenizamos la siesta con una txaranga ruidosa.

Por la tarde visitamos la Escuela de educación especial del municipio de Ciego de Ávila. Entre la mezcla de olores de gasolina y calor, los profesionales del centro nos invitaron a conocer las instalaciones de la Escuela y nos contaron el gran sistema educativo que llevan a cabo con este sector social. A uno de los brigadistas casi le dejamos ingresado en el centro, ya que el agotador hedor del ambiente y el tono de voz del locutor le causo estragos: fuertes mareos. Lo tumbamos en una cama y ahí lo dejamos hasta que se recupero.

Dicho dentro de educación especial, abarca niños de municipios de alrededor, así como avileños. Los niños del municipio del alrededor disfrutan de la estancia semanal, donde reciben además de educación formal una estancia y cuidado más que excelente. Las instalaciones, los talleres y demás recursos de la escuela son muy buenos por lo que los niños disfrutan de una buena estancia. Este centro, es un ejemplo más de la Revolución y de su socialismo, ya que está completamente subvencionado por el Gobierno y no corre ningún gasto ni riesgo para los familiares. ¿Os imagináis que estos centros de acción social los cubra el Gobierno, y no fundaciones ni cajas de ahorros que a menudo se ven envueltas en casos de especulación inmobiliaria y corrupción?